Dicen los que lo vieron, que impresiona el tobillo de Juan Román Riquelme. Que está inflamado y negro por el hematoma. Sin embargo, el tipo se pone fecha, más allá de los pronósticos médicos, que hablan de 15 a 21 días. El ni piensa en bajarse tanto tiempo, le basta con no estar mañana. "Este me lo pierdo pero haremos lo posible a ver si puedo estar en el próximo", anuncia en radio Del Plata. Y habrá que creerle. No sólo eso, sino todo lo que dice...
-¿Te conviene jugar?
-Siempre quiero jugar. Más cuando las cosas no vienen bien. El otro día no tuvimos esa suerte para ganar. Hicimos el 2-1 y pudimos marcar el tercero, nos empatan y nos terminan ganando.
-¿No va en contra tuyo jugar sin estar al 100%?
-Sí, pero yo soy un poco raro. En ese sentido estoy contento. El otro día no me sentí mal. A veces, dicen que Riquelme jugó muy bien y siento que fui un desastre. A veces, dicen que fui un desastre y yo creo que hice un buen partido. Depende de la pelota, si entra y ganamos 3-0, y Riquelme hace lo mismo que cuando se perdió, hablan maravillas.
-¿Pero no te perjudica?
-Yo siempre quiero jugar. Pasa que yo amo a este club. Si no, no estaría trabajando gratis acá. Soy el único pelotudo que trabaja gratis. Y lo hago feliz de la vida. Esta es mi casa, quiero ver al hincha feliz y quiero jugar para verlo feliz. El día que vea que no puedo entrar a la cancha, prefiero que juegue un compañero. Pero si puedo ayudar a mi equipo, y más en la situación en la que está, siempre lo voy a querer hacer. No me quiero perder ningún partido.
-En junio ya se vence tu contrato...
-Yo quiero jugar bien hasta el 30 de junio. Después, Boca no tiene ninguna obligación ni quiero que sienta un compromiso conmigo para renovarme el contrato. Yo di mi palabra y la quiero cumplir. Cuando me tocó irme, extrañé mucho. Estoy contento de estar acá, y quiero jugar mucho más. Si tengo la posibilidad de hacerlo en Boca, mucho mejor. Después se verá.
-Te pretenden varios...
-Mi representante recibió llamadas de varias clubes. Me pone contento. Hasta el 30 de junio, él no puede hablar con nadie. Tengo un compromiso con Boca.
Hace una pausa, habla de Basile. Se convierte en el primer referente en salir a bancarlo públicamente.
-¿Qué le pasó al Coco?
-El estaba molesto por haber perdido un partido que merecimos ganar y no lo hicimos. El estaba molesto por eso. Yo lo he vuelto a ver al otro día y lo vi bien.
-Estaba molesto...
-A todos nos molesta no poder ganar. Nosotros estamos contentos de tenerlo a él como entrenador y sabemos que tenemos que empezar a ganar para que todo empiece de nuevo y a ver si podemos descontarles puntos a los de arriba.
-¿La tienen difícil?
-Sabemos que es difícil, ¿no? Tampoco somos enfermos. No nos vamos a andar mintiendo solos. Si seguimos perdiendo tantos puntos, la cosa se va a poner cada vez más difícil. Tenemos claro que necesitamos ganar dos o tres partidos seguidos para ponernos cerca. Si logramos eso vamos a pelear.
-¿Te conviene jugar?
-Siempre quiero jugar. Más cuando las cosas no vienen bien. El otro día no tuvimos esa suerte para ganar. Hicimos el 2-1 y pudimos marcar el tercero, nos empatan y nos terminan ganando.
-¿No va en contra tuyo jugar sin estar al 100%?
-Sí, pero yo soy un poco raro. En ese sentido estoy contento. El otro día no me sentí mal. A veces, dicen que Riquelme jugó muy bien y siento que fui un desastre. A veces, dicen que fui un desastre y yo creo que hice un buen partido. Depende de la pelota, si entra y ganamos 3-0, y Riquelme hace lo mismo que cuando se perdió, hablan maravillas.
-¿Pero no te perjudica?
-Yo siempre quiero jugar. Pasa que yo amo a este club. Si no, no estaría trabajando gratis acá. Soy el único pelotudo que trabaja gratis. Y lo hago feliz de la vida. Esta es mi casa, quiero ver al hincha feliz y quiero jugar para verlo feliz. El día que vea que no puedo entrar a la cancha, prefiero que juegue un compañero. Pero si puedo ayudar a mi equipo, y más en la situación en la que está, siempre lo voy a querer hacer. No me quiero perder ningún partido.
-En junio ya se vence tu contrato...
-Yo quiero jugar bien hasta el 30 de junio. Después, Boca no tiene ninguna obligación ni quiero que sienta un compromiso conmigo para renovarme el contrato. Yo di mi palabra y la quiero cumplir. Cuando me tocó irme, extrañé mucho. Estoy contento de estar acá, y quiero jugar mucho más. Si tengo la posibilidad de hacerlo en Boca, mucho mejor. Después se verá.
-Te pretenden varios...
-Mi representante recibió llamadas de varias clubes. Me pone contento. Hasta el 30 de junio, él no puede hablar con nadie. Tengo un compromiso con Boca.
Hace una pausa, habla de Basile. Se convierte en el primer referente en salir a bancarlo públicamente.
-¿Qué le pasó al Coco?
-El estaba molesto por haber perdido un partido que merecimos ganar y no lo hicimos. El estaba molesto por eso. Yo lo he vuelto a ver al otro día y lo vi bien.
-Estaba molesto...
-A todos nos molesta no poder ganar. Nosotros estamos contentos de tenerlo a él como entrenador y sabemos que tenemos que empezar a ganar para que todo empiece de nuevo y a ver si podemos descontarles puntos a los de arriba.
-¿La tienen difícil?
-Sabemos que es difícil, ¿no? Tampoco somos enfermos. No nos vamos a andar mintiendo solos. Si seguimos perdiendo tantos puntos, la cosa se va a poner cada vez más difícil. Tenemos claro que necesitamos ganar dos o tres partidos seguidos para ponernos cerca. Si logramos eso vamos a pelear.
